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Soso: «Lo que distingue a CAME es su unidad de gestión y su respeto por el federalismo»

Elías Soso reelecto en CAME 2014
En una elección con unánime apoyo a la continuidad de Osvaldo Cornide en su 21° período al frente de CAME junto a Elías Soso como vicepresidente 1º, 746 delegados de 283 federaciones y cámaras del agro, el comercio, la industria y el turismo de todo el país, apoyaron la gestión del actual presidente, destacando a la entidad como “Abridora de puertas y guía permanente de las PYMES”.

En una convocatoria masiva, que copó el Hotel Panamericano en la Ciudad de Buenos Aires, los empresarios PYMES de todo el país coincidieron que “las PYMES son víctimas de la inflación”, y que “en las subas de precios hay una responsabilidad compartida entre el Estado y los grandes grupos monopólicos que tienen como único objetivo maximizar sus ganancias”.

El presidente Osvaldo Cornide declaró que «CAME tiene éxito porque no reclama, gestiona», mientras el vicepresidente 1º Elías Soso señaló que «Lo que distingue a CAME es su unidad de gestión y su respeto por el federalismo», cerrando el acto con un fuerte abrazo entre ambos, símbolo de años de amistad y unión, que llevaron a CAME a lo más alto de la gestión empresaria de la Argentina.

“Cuando se habla de inflación, no se dice que las PYMES deben pagar terribles impuestos nacionales, provinciales y municipales, que las economías regionales reciben precios ínfimos por sus productos, y que ni siquiera se les permite el ajuste por inflación en sus balances. Esa es la verdadera inflación”. Así resumió el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Osvaldo Cornide, una de las mayores preocupaciones que tienen actualmente los empresarios chicos y medianos.

Soso reelecto en CAME 2014.

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Cornide y Soso, reelectos como Presidente y Vicepresidente 1º de CAME

Reeligen a Soso y Cornide como Presidente y Vicepresidente 1º de CAME.
Más de 500 delegados de 23 provincias y de la Ciudad de Buenos Aires reunidos en el Hotel Panamericano, aprobaron por unanimidad la reelección de Osvaldo Cornide y Elías Soso como presidente y Vicepresidente 1º de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

“Vamos a defender en las paritarias el interés de las PYMES teniendo en cuenta la necesidad de sostener el mercado interno”, señaló hoy Osvaldo Cornide, en la Asamblea anual de la entidad, que actualmente cuenta con seis ramas productivas del comercio, la industria, las economías regionales, el turismo, las mujeres y los jóvenes, y que agrupan a más de 1.500 cámaras, centros, uniones y federaciones.

La CAME además, administra OSDEPYM, una obra social que hoy cuenta con 340.000 beneficiarios y es propietaria, junto con la Federación Argentina de Empleados de Comercios y Servicios (FAECYS), del Instituto Asegurador Mercantil, compañía de seguros que tiene casi 300.000 asociados.

“Nuestra función es acompañar la industria y la producción nacional, y defender a las PYMES de los grupos monopólicos que actúan en el comercio y la industria”, finalizó el dirigente empresario.

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La Saga de un Líder Empresario

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Homenaje a Elías Soso

Cena Homenaje al Señor Elías Soso realizada el 3 de agosto de 2012 en el Salón Metropolitano de la ciudad de Rosario, con motivo de la finalización de su mandato, al cumplirse 30 años a cargo de la presidencia de la entidad.

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Rosario

Elías Soso en «Trayectorias que merecen ser reconocidas»


Elías Soso cuenta cómo se convirtió en uno de los personas más emblemáticas de la ciudad de Rosario en el programa «Trayectorias que merecen ser reconocidas» de Raúl Lanzavechia y Arturo Guntero.

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Rosario

Elías Soso: “Calle San Luis es una simbiosis maravillosa de distintas culturas”

Elías Soso y la calle San Luis de Rosario.
Ni Córdoba la lujosa, ni San Martín la portuaria, ni San Lorenzo la “bolsista”. En Rosario, la más democrática y popular de las calles es San Luis, atada desde el principio a la historia local y espejo exquisito del cruce de religiones y nacionalidades que armó como un rompecabezas las piezas originales de la Chicago argentina.

Testigo de la llegada de los grandes contingentes de inmigrantes y ejemplo único en su tipo de tolerancia y diversidad, esa franja horizontal que recorre el centro de este a oeste y que supo albergar a “turcos y judíos” funciona desde hace más de un siglo como el mejor sensor del humor económico de la ciudad. Entre vidrieras repletas, veredas ambulantes y ofertas de estación, la calle San Luis acompañó el crecimiento de Rosario desde sus orígenes portuarios y cerealeros hasta el esplendor de mediados de siglo, para sucumbir después bajo las botas con ruido neoliberal que estrujaron la economía con recetas librecambistas.

“La calle San Luis es el resultado de una historia y de una simbiosis maravillosa que nace cuando empiezan a caer a Rosario contingentes de inmigrantes árabes y judíos, muchos de ellos de habla árabe con origen sirio”, rememoró Elías Soso, máxima referencia de dirigente empresarial local y testigo privilegiado de la vida comercial regional.
El dirigente. El dirigente, que el próximo 3 de agosto cuando se cumplan tres décadas como presidente de la Asociación Empresaria de Rosario (AER) dejará la conducción de la entidad, fue un protagonista casi excluyente de la historia económica que recorrió esta arteria y su militancia como dirigente empresarial estuvo íntimamente ligada al conocimiento minucioso de la realidad de los comerciantes que la habitan.

La participación pública de Soso arrancó cuando a sus 28 años pisó por primera vez la sede de AER. Por eso, es imposible analizar la trayectoria del dirigente rosarino sin contemplar su origen como comerciante en esta calle tan emblemática como particular de la actividad empresaria local.

Además de las colectividades italianas y españolas, la inmigración árabe y hebrea aportó contingentes muy significativos a la conformación demográfica de la ciudad, con la peculiaridad de que a diferencia de otras nacionalidades, los “turcos” y los “rusos” no fueron a las colonias agrarias sino que se instalaron en el centro.

En el caso particular rosarino, las instituciones y los comercios se concentraron en un pequeño radio que tuvo eje en San Luis y Dorrego, pero que fue avanzando hacia el río y se extendió hacia otras calles. Esa estructura del espacio, que data de la época de creación de las asociaciones, se mantiene todavía hoy. “Los inmigrantes se empezaron a juntar de a poco a partir de principios de 1900 y hasta 1920, ahí es cuando se produjo el aluvión más grande, y la mayoría se asentó por Dorrego y San Luis, donde hoy está la marca artística en el piso que toma letras tanto del alfabeto árabe como del hebreo y que significa “hogar”, porque en eso se transformaba Rosario para esa gente, en un hogar al que venían a vivir y a trabajar”, reflexionó Soso.

Casi en simultáneo se construyó la sinagoga, la iglesia ortodoxa por calle Italia y la católica bizantina por Moreno.

“Las iglesias funcionaban como lugares donde los inmigrantes se juntaban, allí se reunían los paisanos para pasar sus fines de semana y para trabajar un poco también, resolver cosas y conversar”, muchos de ellos dueños de negocios asentados sobre San Luis, y otros tantos sobre Dorrego.

Mientras nacía en Estados Unidos, en 1929, la mayor crisis capitalista de la historia, Rosario veía como circulaban por sus calles las primeras líneas de ómnibus de transporte de pasajeros, al tiempo que la electricidad reemplazaba al gas definitivamente en el alumbrado público.

Ese mismo año abrió su comercio la familia Soso por calle Dorrego, una tienda de venta de tejidos que estaba “cerca de los Sauán y de los apellidos más representativos de ambas colectividades”.

“Para nosotros no existían los problemas de religión, eso quedaba muy lejos afortunadamente”, contó Soso.

LA EXPANSION. Con el correr de los años la calle fue creciendo y llegó hasta Paraguay, en lo que fue su primer tramo de crecimiento. “Por calle San Juan estaban los carreros que nos llevaban los paquetes al ferrocarril, porque acá estaba la estación de ómnibus central, adonde llegaban los ómnibus que venían desde afuera, y después con esos carros llevábamos los paquetes hasta la estación de trenes, tanto la Rosario Central como la Rosario Norte”, relató Soso.

La ciudad hervía y se movía al compás del desarrollo ferroviario. Dentro de ese cosmos, calle San Luis funcionaba como un universo aparte que concentraba en sus veredas y mostradores lo más puro del comercio: “Rosario en ese entonces era un enjambre de gente comprando que venía desde todas partes del país, desde el Chaco, Corrientes, Entre Ríos, del norte de Santa Fe, de Córdoba, y de la provincia de Buenos Aires”, recordó.

Los visitantes ocasionales buscaban en calle San Luis lo que no encontraban en otros lugares, los mayoristas en serio. “Los mayoristas eran mayoristas en serio, había mercadería en gran cantidad, algo que hoy es difícil de encontrar. Los negocios eran ampulosos, había grandes empresas que con el tiempo fueron perdiendo la fuerza que tenían antes en el rubro”, agregó el dirigente.

Ese mundo se regía por sus propias leyes y reglas, que seguían las normativas oficiales pero también se movían según las costumbres que los propios inmigrantes habían forjado entre ellos como forma de solidaridad y protección frente a la sociedad que los acogió. “En calle San Luis había un concepto muy extraordinario de la palabra empeñada. Por ejemplo, cuando llegaban los trenes desde el norte llegaban a una hora tardía de la noche, en esos servicios llegaban los del Chaco, que se bajaban de los trenes y se iban para calle San Luis. Entonces si vos tenías el negocio abierto, vos le ganabas de mano a todos los demás porque al otro día ya era tarde, ya habían comprado. A partir de esa situación todos los comerciantes se pusieron de acuerdo en un documento que todos firmaron, y que decía que auquel que no cumpliera con el cierre a las 20 horas, iba a ser repudiado de manera ejemplar”, recordó Soso.

“Yo pregunté que quería decir ser repudiado, y me contestaron que significaba que no podría jugar nunca más a las cartas con ellos, y que no le iban a hablar. Y eso se cumplía, y era un castigo terrible al que nadie quería quedar expuesto”.

Otros tiempos. La historia data de la década del 30. El lugar donde los paisanos se juntaban a jugar a las cartas era un café que estaba por la propia San Luis entre Italia y España. “Allí jugaban por unas chirolas, lo que estaba prohibido. Entonces ponían a algún chico en la puerta para mirar si venía la policia, y si aparecía alguno el chico tiraba una cuchara que hacía un ruido bárbaro y todos desaparecían. Todos se llevaban bien, y los negocios trabajaban bien”. “La palabra empeñada se cumplía. También es verdad que se conocían todos, se encontraban permanentemente porque todos vivían allí, iban a la misma iglesia, al mismo bar, casi todos tenían incluso una relacion de parentezco, y por suerte el tema religioso nunca fue una diferencia, hasta los chicos íbamos todos a la misma escuela”.

Después, la calle y sus tiendas siguieron creciendo hacia el este, para llegar hasta Corrientes. Con los años el empuje hacia esa zona se fue haciendo cada vez más fuerte, y era la propia presión de los negocios la que llevaba todo para allá.

Según Soso, la dirección de la expansión —hacia el río— fue porque hacia el otro lado, o sea hacia Oroño, estaba la Asistencia Pública y las propiedades ya estaban construidas. “Las relaciones eran casi familiares, y todos se ayudaban entre ellos. Después todo creció, se occidentalizó, de cierta manera se volvió más anónimo. El tema de la solidaridad entre paisanos fue desapareciendo a medida que la sociedad crecía mas y mas, y los capitales también”, explicó el dirigente empresarial.

Según relató Soso, la cultura del trabajo era una constante: “la zona más abnegada al trabajo estaba en la calle San Luis, ahí laburábamos todos, si tu viejo tenía que darle trabajo al hijo se lo daba a la pariente de la otra cuadra para acostumbrarlo al trabajo, era una escuela del esfuerzo, pero no de la gran renta, ya que no fue rentística. Las enormes fortunas se hicieron en otros ámbitos de trabajo, en los fierros, en la construcción, en lo financiero, acá se hizo plata pero no fortunas arrolladoras”.•

Elías Soso y la calle San Luis de Rosario.

Fuente: La Capital

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AER

En su último día como presidente de la Empresaria, Soso da la nota

Elías Soso deja la presidencia de la Asociación Empresaria de Rosario.
Aunque le cueste reconocerlo y asegure que va a seguir vinculado a la actividad “pero desde otro lado”, hoy es el último día de Elías Soso al frente de la Asociación Empresaria de Rosario. Para el periodismo, Soso siempre va a ser uno de los mejores tituladores. No existe nota que se le haya hecho donde el dirigente no se despache con alguna frase que va derecho a encabezarla. “No fui un dirigente delivery”, dijo ayer a los pocos minutos de empezar esta nota con punto biz y la siguió con una carcajada, sabiendo que había tirado el titular.

Después de 46 años de gremialismo empresario, Soso decidió abrirse de la presidencia dejando paso a Ricardo Diab y su actitud bien vale un repaso por los hitos de su carrera, sus éxitos, sus fracasos, sus mejores y sus peores decisiones, sus amistades y sus enemistades. La idea era hablarlo sentados con un café de por medio, pero el incansable Elías estaba en plena autopista volviendo de Buenos Aires “de una reunión muy importante”, dijo creando cierto suspenso.

El próximo viernes en el salón Metropolitano se llevará a cabo una cena para homenajearlo y ya hay vendidas más de 700 entradas e incluso se espera la presencia del mismísimo vicepresidente, Amado Boudou.

¿Cuál considera que fue su mejor momento al frente de la Empresaria?

Creo que fueron los últimos cinco años, donde la entidad se ancló en el cariño de la gente. La Asociación ya tenía alma y era reconocida como parte de la ciudad, además se había ganado espacio nacional, éramos escuchados en diferentes ámbitos porque nos adentramos en los problemas de la sociedad, sin enfrentamientos políticos, siempre con consenso y nunca con agresión. Y todo eso se consolidó en estos últimos años.

¿Qué medidas cree que fueron las más acertadas?

Recuerdo haber acompañado a comerciantes porque les cortaban la luz, o porque no les quisieron habilitar un negocio. La Asociación siempre estuvo ahí, buscando la solución de ese problema. Nunca fui un dirigente delivery, no creo en los dirigentes esporádicos. Siempre tuvimos la virtud de adelantarnos a los acontecimientos y hemos juzgado opinión en los hechos más diversos. Hay muchos especuladores, pero nosotros nunca esperamos el diario del lunes para hablar del domingo.

¿El momento más duro?

Puede ser en la década del 70? cuando salimos a pedir por la democracia en defensa de la industria nacional, de los puestos que se estaban perdiendo. En el 81? fuimos el alma mater de la Convocatoria Nacional Empresaria (Conae), un llamado de atención que el movimiento empresario daba a un mecanismo artero que estaba terminando con la economía nacional. Dirigente es el que va adelante de los acontecimientos, el otro es un dirigido.

¿Cómo fue su relación con las otras entidades?

Yo siempre tuve coherencia ideológica: siempre defendí el mercado interno, la industria nacional y la sustitución de importaciones. Por lo tanto, hemos ido siempre a buscar a todas las entidades para armar grupos de trabajo, incluso me acuerdo que una vez firmamos un convenio para pedir por la conexión Rosario-Victoria, el Aeropuerto y la conexión Rosario-Córdoba , con la Federación Gremial, la Bolsa de Comercio y la Sociedad Rural.

A fines de lo 90? hubo un período en que dejó la presidencia en manos de un representante del supermercadismo. ¿Hubo una pelea interna en ese momento?

Jamás tuvimos lucha interna. Yo pensé siempre con criterio de que las entidades juegan un rol protagónico y en ese momento el supermercadismo había cubierto un espectro económico muy importante de la ciudad. Jamas me aferré al poder porque quise, sino que ahora tomo la decisión en contra de lo que piensa el empresariado de la ciudad. Hay que predicar con el ejemplo, saber dar espacios. La etapa de los dirigentes que nos hicimos con esfuerzo, intuición y calle, ya está, ahora vienen tiempos donde hay que tomar conciencia que existen otros métodos.

¿Cuál fue el intendente con el que peor se llevó?

Siempre tuve dificultades con las políticas económicas liberales porque nunca estuve de acuerdo. Me acuerdo que una vez estuvimos enfrentados con el radicalismo cuando Usansizaga estaba en el poder, pero siempre en el marco del respeto por su gestión. Fue un aumento de impuestos en medio del proceso inflacionario, le pedimos a Vernet que le adelantara plata porque la inflación se comía el ingreso.

¿Y con el que mejor se llevó?

No puedo nombrar uno. Rosario tuvo muy buenos intendentes, cada uno tuvo un perfil pero todos estuvieron de 8 para arriba y producto de todas esas gestiones hoy tenemos este presente que yo considero que es muy bueno.

¿Un proyecto al que le han puesto mucho esfuerzo para impulsarlo desde la entidad pero que no haya salido?

El tren bala a Buenos Aires. Habría que haber jugado más fuerte con eso.

¿Y uno que sí haya salido?

El Patio de la Madera. Recuerdo que nos peleamos con todos porque decían que era una obra faraónica y nosotros decíamos que era necesario. No nos hemos equivocado.

Su relación con la política fue…

Yo soy y he sido desarrollista, el gran dolor de mi vida fue el golpe a Frondizi. Se que no soy el dueño de la verdad absoluta y eso me ha valido amigos en la política. En el 95? integré la lista de Cavallero como candidato a intendente pero no pudo ser. En ese momento la idea era avanzar sobre el Ministerio de Producción de la Provincia. Después ganó Obeid e hizo muy buena gestión. Mi problema fue siempre que yo no era ni radical ni peronista y este país es bipartidista. Además, la política te trata como a un extraño cuando no venís de ahí.

¿Una equivocación?

Nos hemos equivocado en más de una oportunidad, por ejemplo en el primer tramo del Gobierno de Menem, donde por decisión de la mayoría, la Asociación convalidó la política que se estaba instrumentando por la hiperinflación. Pero también fuimos uno de los primeros en darnos cuenta que eso no podía ser y en el 94? le metimos pata en contra del Gobierno a pesar de la relación que teníamos. Nos avivamos a tiempo de que eso iba mal. Soy autocrítico. Lo más grave que puede hacer un dirigente cuando comete un error es reiterarlo, porque eso va en contra de su prestigio personal.

¿A qué dirigentes empresarios admira?

A Jose Censabella en primer lugar. Por su prestancia, a Humberto Bolando; a Osvaldo Cornide por su temperamento; y por sus agallas, a Federico Boglione.

¿Qué opina de quienes creen que los dirigentes gremiales utilizan sus puestos para hacer negocios personales?

El que hace negocios personales no es dirigente, es un empresario que utiliza un mecanismo de vinculación política para hacer negocios. Están fuera del campo de la ética.

¿Cuál fue el presidente con el que más encuentros tuvo?

Me vi con todos los presidentes, salvo con Alfonsín. Una vez hicimos un paro importante en su época y se enojó. Me acuerdo que Evaristo Monti salió a defenderme.

¿Cómo definiría su relación con el periodismo?

Once puntos. Nunca tuve un problema con ningún periodista de mi ciudad y tampoco me escondí ni use el argumento de que no estaba en Rosario para no atender. Siempre juzgué opinión. Recuerdo que en el 89? en pleno asalto a los supers, tenía 40 grados de fiebre a las 4 AM y me estaban haciendo nota en una radio. Es obligación del dirigente dar la cara.

Fuente: Punto Biz.

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Elías Soso deja la conducción de la Asociación Empresaria


«Ha llegado el tiempo de revitalizar la entidad», sostuvo el dirigente. Ricardo Diab es quien tomará la posta. El traspaso está programado para el 3 de agosto.

«Ha llegado el tiempo de revitalizar la entidad», anunció Elías Soso, quien desde hace años lidera el destino de la Asociación Empresaria de Rosario y ahora dará un paso al costado. El dirigente confirmó que Ricardo Diab es quien tomará la posta y que el traspaso está programado para 3 de agosto.

«Está acordado, conversado con dirigentes de la entidad», planteó Soso, en diálogo con Radio 2. Recordó cómo estaba la institución cuando comenzó su mandato. «Cuando entramos a trabajar estaba desarticulada, hoy tenemos una cámara organizada», destacó.

Soso aclaró que mantendrá su cargo como vicepresidente de Came. «Lo voy a seguir ejerciendo», sostuvo. Y anticipó que intentará «darle un toque especial» a sus funciones en ese marco.

En cuanto a Ricardo Diab, su sucesor, planteó que «hace veinte años que está en la asociación» y que han trabajado cerca. «Tiene otras características, tiene más tareas en conjunto. Yo soy un empresario dirigente delivery a domicilio», bromeó. «No son tiempos de esfuerzo, hoy no basta con eso. Hay que meterle actualización, modernización, utilización de nuevos métodos», subrayó.

Por su parte, también entrevistado por Radio 2, Diab definió a Elías Soso como «un personaje único e irrepetible». Admitió que quienes han trabajado cerca de él se han agarrado «algunas broncas» pero consideró que se trata de un dirigente con «carisma, percepción» y que siempre tiene «la palabra justa». «Va a resultar fácil reempalzarlo porque no puedo competir», ironizó.

Fuente: Rosario3.com

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Elías Soso participará en la Semana Social 2012

Elías Soso, Jorge Lozano y Osvaldo Cornide.
Elias Soso, Vicepresidente 1º de Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y Presidente de la Asociación Empresaria de Rosario(AER), integrará un panel de dirigentes empresarios en la Semana Social 2012 que se realizará del 22 al 24 de junio en la ciudad de Mar del Plata.

Dicho encuentro, a celebrarse bajo el lema “Trabajo, dignidad y justicia social”, genera con la participación de obreros y empresarios año tras año un escenario adecuado para la formación y reflexión de ciudadanos y dirigentes. La invitación a participar surgió de la visita del presidente de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Argentina, Monseñor Jorge Lozano, a la sede de la CAME. En esa ocasión fue recibido por el titular de la entidad Osvaldo Cornide y el Vicepresidente 1º Elias Soso.

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La AER en el debate por las cocheras subterráneas

Cocheras Subterráneas.
El pasado viernes 11 de mayo, el Presidente de la Asociación Empresaria de Rosario Elías Soso, acompañado por comerciantes del centro, recibió a los concejales Manuel Sciutto y Viviana Foresi, quienes les informaron sobre las características de los proyectos de estacionamientos subterráneos.

Durante el encuentro los comerciantes escucharon la presentación respecto de los espacios debajo de la Plaza San Martín, el Complejo Parque España y los entornos de la Plaza del Foro.

Este encuentro tuvo como objetivo fundamental presentar, a los empresarios y comerciantes de la ciudad, el proyecto de Cocheras subterráneas que ya se discute en el Concejo Municipal.

“Es importante la presencia de los concejales porque nos permitirá conocer los detalles de las iniciativas y además, exponer nuestras inquietudes”, expresó Elías Soso.

Por su parte la edila explicó: “Esta es la primera de una serie de reuniones con empresarios, comerciantes, vecinos, organizaciones y otros actores involucrados en el desarrollo urbanístico de la ciudad. Creemos que es fundamental que aclaremos todas las dudas que puedan tener respecto de esta inversión”.

Durante la reunión, Foresi también explicó los beneficios que consideran tendrían los automovilistas con la implementación de estas nuevas plazas de estacionamiento. En cuanto al aspecto ecológicos expresó: “El proyecto prevé el cuidado del medioambiente, las líneas de plátanos no serán removidas para esta obra y además tendrá sólo dos ingresos que conducirán hasta el centro de la manzana, donde estarán los estacionamientos”.

También aclaro que “la elección de una empresa constructora para las cocheras subterráneas será a través de un llamado a licitación y la inversión será exclusivamente privada”

Por su parte, Sciutto destacó que “se preveé que el 20% del monto de la inversión se destine al mejoramiento de la superficie externa de los espacios públicos donde pueda existir una cochera subterránea. Así, estaría garantizado que luego de finalizadas las obras, cada plaza será reacondicionada”.

En tanto, los comerciantes transmitieron su perspectiva respecto de los diferentes inconvenientes que ven el centro de la ciudad en materia de movilidad. Coincidieron en que es necesario tener lugares para estacionar. “Creemos que es importante avanzar con las cocheras, y estamos a favor de ello, no obstante dejamos en manos de los especialistas la determinación de la ubicación y la modalidad de las mismas. Es imperioso darle solución a los inconvenientes de traslado en el centro, y la ubicación de los automóviles es muy importante”.

Fuente: AER